La madre de una chica entrada en el Instituto Religioso de las Servidoras me ha concedido una interesante entrevista sobre la vocación de su hija.
- ¿Eres feliz de tener una hija monja?
- La felicidad de mi hija es mi felicidad, y la verdadera felicidad solo la puedes encontrar en Cristo.
- ¿Cómo conoció tu hija a la Servidoras?
- Ella estudiaba Educación para niños Especiales en la universidad, un día que iba en el bus le llamo la atención el color del hábito de las Servidoras y se animo a buscarlas por Internet, cuan grande fue su sorpresa que descubrió que una de sus principales labores era el albergue para niños especiales en estado de abandono, inmediatamente comenzó a tener comunicación con ellas a través del correo.
- ¿Cómo surgió la vocación de tu hija?
- Ella siempre tuvo vocación de servicio, donde podía ayudar siempre estaba allí, pero cuando conoció mas a Cristo a través de un retiro, entonces supo que esa vocación de servicio, era la vocación de amor a Dios a través del prójimo.
- ¿Qué consejo darías a las madres que han descubierto que sus hijas quieren abrazar la vida religiosa?
- Que no hay mejor esposo para una hija que el Señor Jesús, el jamas le fallara. Con esto no les digo que no duele, claro que si, se extraña, porque somos humanos, pero esto va mas allá de la parte humana, esto es amor puro, es santidad. Hay que tener claro que Dios cuando nos llame no nos preguntara si le dimos cosas materiales, nos dirá que hicimos para que nuestros hijos puedan ver algún día su rostro. Y por último, pero no lo menos importante, Dios colma de abundantes bendiciones a tu familia, eso lo estoy sintiendo cada día.
- Por lo que dices, al parecer han sido contagiados por el entusiasmo y el celo de las Servidoras. ¿Es eso cierto?
- SÍ, y lo pongo en mayúscula porque conocer el carisma de las Servidoras nos lleno de un profundo amor, y mucho mas a mi esposo en el cual inclusive hubo una gran conversión. El trabajo de las Servidoras es increíble, pero su amor por el prójimo y por Cristo no tiene límites, están llenas amor y eso lo demuestran en la alegría que contagian.